Eso es lo que le reclamé a mi madre por teléfono cuando iba rumbo a Huautla y ella dijo...
Ok, yo llegué tarde a casa, y tampoco ha sido su culpa, tuvo que hacer un millón de cosas en el día y hace pocas horas ya de noche llegó corriendo con un ramo de cempasúchil, 3 calaveritas, un tamarindo y 3 panes diciendo entre dientes "...pero ahorita pongo mi ofrenda.", se preparó para que ella y mi padre partieran a Oaxaca a velar a nuestros muertos y se fue...
Lo que me consuela es que obviamente sí estaba dentro de sus planes y pues simplemente no le ha dado tiempo de que pongamos la ofrenda :(, muchos lo verán como algo equis (sin importancia) pero a mí me ha dado mucha tristeza que se haya ido y yo aquí sin saber que hacer, ustedes dirán que poner una ofrenda no es difícil y se preguntarán ¿Qué pasa Cntl, eres una tonta o qué? Pero no, que la cosa ahora no va tanto por ahí, que lo que me cuesta trabajo aceptar es que la ofrenda no va a quedar como la de años pasados y en segunda que no tendré supervisora, pues siempre que la ponemos estoy acostumbrada a preguntarle...
¿Aquí mamá?...
¿Cómo vez, ponemos esto?...
¡Mamá no alcanzo me ayudas!... Ok, bueno no, creo que yo alcanzo más...
¿Mamá lo vez chueco?... ¿Mamá que si lo vez chueco?... ¿No mamá, segura?... Pues yo sí...
Pues mi hermana quien se andaba comiendo las pocas mandarinas que hay, podrá dormir sabiendo que tenemos muertos con hambre rondando en la casa, pero yo no, así que me desvelaré un rato y haber que sale...